miércoles, 30 de diciembre de 2009
COSMOVISION, TERRITORIO Y AGUA
CARTA DE JUAREZ A MAXIMILIANO
La privatización de las guerras
Las PMFs son expresión de una dramática fusión de métodos neoliberales con la proyección unilateral-militarista estadounidense de reafirmación imperial, pretextando luchar contra el terrorismoManuel E. Yepe
Las modernas Firmas Privadas Militares, en inglés Private Military Firmso PMFs, también identificadas como "compañías privadas de seguridad" o "compañías proveedoras de servicios militares", son las tradicionales firmas empleadoras de guardias armados, compañías suministradoras de material de defensa, entrenadores militares y consultores ofertantes de consejos sobre estrategia, que han resurgido con mayores empeños y ambiciones tras el fin de la guerra fría, en la última década del siglo XX.
A diferencia de las tradicionales industrias militares, las PMFs operan en las zonas de combate y en otras áreas, donde la violencia puede ser inminente. Venden sus servicios a gobiernos de países, grandes corporaciones y compañías privadas, así como a sardónicas agencias de ayuda humanitaria y cualquier otro cliente.
En Europa, durante el siglo XV proliferaron las "compañías libres" de soldados suizos, italianos y alemanes, que vendían sus servicios a príncipes y duques. En el siglo XVIII hubo regimientos suizos que constituían formaciones élites en los ejércitos regulares de varios países.
Pero, a partir de ese mismo siglo XVIII, los mercenarios fueron, en su mayoría, soldados de fortuna actuando individualmente. Tras la Segunda Guerra Mundial, se extendió la práctica de su contratación en África y países coloniales de otras regiones del tercer mundo.
El crecimiento y multiplicación de las PMFs a raíz de la extinción de la Unión Soviética, se relaciona con el sentimiento de que los peligros de guerra mundial habían desaparecido o estaban en proceso de extinguirse. Pero, además y sobre todo, a la tendencia a la privatización de los servicios antes prestados por los gobiernos, como parte del esquema neoliberal estimulador de la empresa privada y del debilitamiento del papel de los estados, que pretendían imponer en todo el mundo los vencedores de la guerra fría, guiados por Wall Street más que por la Casa Blanca o el Pentágono.
Las fuerzas armadas fueron llamadas a cumplir sus misiones defensivas con menos barcos, aviones, y personal, dejando muchas de sus funciones de retaguardia (como la reparación de tanques, entrenamiento de pilotos, elaboración de alimentos, etc.) a cargo de las empresas civiles privadas.
Pero la paz que se avizoraba no se avenía a los intereses del imperio, necesitado por muchos motivos de guerras para resolver sus graves contradicciones económicas en una coyuntura crítica.
Desaparecido el peligro que representaba la URSS para la hegemonía estadounidense en el planeta, sin otra superpotencia que justificara enormes inyecciones de recursos a la industria armamentista, Washington encontró un "contendiente" que presentó credenciales el 11 de septiembre del 2001: los países pequeños del tercer mundo utilizando malévolos métodos terroristas.
Mágica solución que ha permitido que Estados Unidos crezca, en vez de reducir, sus presupuestos militares.
A partir de la declaración de "guerra al terrorismo" formulada por el gobierno de Estados Unidos tras aquel repudiable acto en Nueva York y Washington, que dejó 3 000 víctimas civiles, el negocio de las PMFs ha florecido de manera inusitada.
Las agencias de espionaje y subversión del gobierno utilizan crecientemente para la obtención y análisis de inteligencia los servicios de la industria militar privatizada, que ya cuenta con más personal en los escenarios bélicos en Iraq, Afganistán y Paquistán que la propia CIA, y experimenta un significativo impulso en otras áreas del mundo.
Recientemente, las agencias de prensa divulgaron que un "contratista" del gobierno de Estados Unidos había sido detenido en La Habana cuando repartía teléfonos celulares, computadoras y otros equipos de comunicación a grupos contrarrevolucionarios. Se supo que el funcionario trabajaba para la Development Alternatives, Incorporated (DAI), importantePMF contratista del Departamento de Estado, la Agencia Internacional de Desarrollo de Estados Unidos (USAID) y el Pentágono que, en realidad, es una de las supuestas empresas privadas que han estado asumiendo funciones que antes desarrollaba la CIA por intermedio de sus redes clandestinas.
Con un abultado expediente contra Venezuela, que incluye su involucramiento en el golpe de estado a Chávez en el 2002 y el diseño de la guerra mediática contra el gobierno venezolano, la DAI opera también en Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador, Guatemala, Haití, Honduras, México, Nicaragua, Perú, República Dominicana y El Salvador, así como en muchos otros países, incluyendo Afganistán.
Se conocen, además, otras PMFs que trabajan en el campo del espionaje, la inteligencia y la subversión: la National Endowment for Democracy (NED), la Oficina de Iniciativas para la Transición (OTI), el Instituto Republicano Internacional (IRI), el Instituto Demócrata Nacional (NDI), Freedom House, y la Pan American Development Foundation (PADF), que nutren sus finanzas a partir de contratos con organizaciones estadounidenses de las que se sirve la CIA para ejecutar sus funciones contra gobiernos y naciones, que oponen sus soberanías a la hegemonía de Washington en todo el planeta.
Las PMFs son expresión de una dramática fusión de métodos neoliberales con la proyección unilateral-militarista estadounidense de reafirmación imperial, pretextando luchar contra el terrorismo.
Manuel E. Yepe
Las modernas Firmas Privadas Militares, en inglés Private Military Firmso PMFs, también identificadas como "compañías privadas de seguridad" o "compañías proveedoras de servicios militares", son las tradicionales firmas empleadoras de guardias armados, compañías suministradoras de material de defensa, entrenadores militares y consultores ofertantes de consejos sobre estrategia, que han resurgido con mayores empeños y ambiciones tras el fin de la guerra fría, en la última década del siglo XX.
A diferencia de las tradicionales industrias militares, las PMFs operan en las zonas de combate y en otras áreas, donde la violencia puede ser inminente. Venden sus servicios a gobiernos de países, grandes corporaciones y compañías privadas, así como a sardónicas agencias de ayuda humanitaria y cualquier otro cliente.
En Europa, durante el siglo XV proliferaron las "compañías libres" de soldados suizos, italianos y alemanes, que vendían sus servicios a príncipes y duques. En el siglo XVIII hubo regimientos suizos que constituían formaciones élites en los ejércitos regulares de varios países.
Pero, a partir de ese mismo siglo XVIII, los mercenarios fueron, en su mayoría, soldados de fortuna actuando individualmente. Tras la Segunda Guerra Mundial, se extendió la práctica de su contratación en África y países coloniales de otras regiones del tercer mundo.
El crecimiento y multiplicación de las PMFs a raíz de la extinción de la Unión Soviética, se relaciona con el sentimiento de que los peligros de guerra mundial habían desaparecido o estaban en proceso de extinguirse. Pero, además y sobre todo, a la tendencia a la privatización de los servicios antes prestados por los gobiernos, como parte del esquema neoliberal estimulador de la empresa privada y del debilitamiento del papel de los estados, que pretendían imponer en todo el mundo los vencedores de la guerra fría, guiados por Wall Street más que por la Casa Blanca o el Pentágono.
Las fuerzas armadas fueron llamadas a cumplir sus misiones defensivas con menos barcos, aviones, y personal, dejando muchas de sus funciones de retaguardia (como la reparación de tanques, entrenamiento de pilotos, elaboración de alimentos, etc.) a cargo de las empresas civiles privadas.
Pero la paz que se avizoraba no se avenía a los intereses del imperio, necesitado por muchos motivos de guerras para resolver sus graves contradicciones económicas en una coyuntura crítica.
Desaparecido el peligro que representaba la URSS para la hegemonía estadounidense en el planeta, sin otra superpotencia que justificara enormes inyecciones de recursos a la industria armamentista, Washington encontró un "contendiente" que presentó credenciales el 11 de septiembre del 2001: los países pequeños del tercer mundo utilizando malévolos métodos terroristas.
Mágica solución que ha permitido que Estados Unidos crezca, en vez de reducir, sus presupuestos militares.
A partir de la declaración de "guerra al terrorismo" formulada por el gobierno de Estados Unidos tras aquel repudiable acto en Nueva York y Washington, que dejó 3 000 víctimas civiles, el negocio de las PMFs ha florecido de manera inusitada.
Las agencias de espionaje y subversión del gobierno utilizan crecientemente para la obtención y análisis de inteligencia los servicios de la industria militar privatizada, que ya cuenta con más personal en los escenarios bélicos en Iraq, Afganistán y Paquistán que la propia CIA, y experimenta un significativo impulso en otras áreas del mundo.
Recientemente, las agencias de prensa divulgaron que un "contratista" del gobierno de Estados Unidos había sido detenido en La Habana cuando repartía teléfonos celulares, computadoras y otros equipos de comunicación a grupos contrarrevolucionarios. Se supo que el funcionario trabajaba para la Development Alternatives, Incorporated (DAI), importantePMF contratista del Departamento de Estado, la Agencia Internacional de Desarrollo de Estados Unidos (USAID) y el Pentágono que, en realidad, es una de las supuestas empresas privadas que han estado asumiendo funciones que antes desarrollaba la CIA por intermedio de sus redes clandestinas.
Con un abultado expediente contra Venezuela, que incluye su involucramiento en el golpe de estado a Chávez en el 2002 y el diseño de la guerra mediática contra el gobierno venezolano, la DAI opera también en Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador, Guatemala, Haití, Honduras, México, Nicaragua, Perú, República Dominicana y El Salvador, así como en muchos otros países, incluyendo Afganistán.
Se conocen, además, otras PMFs que trabajan en el campo del espionaje, la inteligencia y la subversión: la National Endowment for Democracy (NED), la Oficina de Iniciativas para la Transición (OTI), el Instituto Republicano Internacional (IRI), el Instituto Demócrata Nacional (NDI), Freedom House, y la Pan American Development Foundation (PADF), que nutren sus finanzas a partir de contratos con organizaciones estadounidenses de las que se sirve la CIA para ejecutar sus funciones contra gobiernos y naciones, que oponen sus soberanías a la hegemonía de Washington en todo el planeta.
Las PMFs son expresión de una dramática fusión de métodos neoliberales con la proyección unilateral-militarista estadounidense de reafirmación imperial, pretextando luchar contra el terrorismo.
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El Foro Social Mundial cumple 10 años de proceso en la consolidación de "otro mundo posible"
Con el transcurrir de los años, el FSM se afirmó y conquistó espacio nacional e internacionalmente, con participación creciente de personas y multiplicación de Foros Regionales, Nacionales y Locales en distintas partes del mundo. En 2009, nueve años después de la primera edición del FSM, Belem en Pará (Brasil), recibió a 150.000 participantes. Un levante de gente unida en el propósito y pensamiento de que un mundo mejor y más justo es cada vez más urgente.
En 2010, el FSM cumple diez años de proceso con una edición especial de evaluación del camino recorrido, que se llevará a cabo en la Grande Porto Alegre, entre los días 25 y 29 de enero. Además, se realizarán 27 Foros Sociales a lo largo del año, de manera descentralizada, con miras al FSM de 2011, que se realizará en Dakar, África.
En entrevista con ADITAL, Francisco Whitaker Ferreira, Chico Whitaker, uno de los que idearon en su comienzo el FSM, habla sobre los avances y desafíos de los 10 años de Foro, la importancia del espacio para los movimientos y organizaciones sociales y las expectativas para los próximos años.
Adital- En 2010, el Forum Social Mundial cumplirá 10 años. ¿Qué evaluación hace usted de estos diez años de proceso? ¿Cree que el FSM ha cumplido su objetivo inicial?
Chico Whitaker - Sí, pienso que sí. El objetivo inicial del FSM era romper con la dominación del "pensamiento único" en el que se basaba el Forum Económico Mundial de Davos: no hay otra alternativa más que el mercado como motor y regulador de la actividad económica. Y desde ese Forum, los "dueños del mundo" (multinacionales y dirigentes de los países más ricos) dictaban las reglas de la vida económica del planeta.
Era el comienzo de un nuevo siglo, en el que se comenzaba a superar, con manifestaciones de protesta y de resistencia contra el dominio del mundo por el capital, la perplejidad causada por la caída del Muro de Berlín, que simbolizó el desmoronamiento de toda una experiencia de construcción de socialismo. Centrado en lo "social" y no en lo "económico", el primer Forum Social Mundial fue entonces organizado a partir de otra afirmación: "otro mundo es posible". Con esto el Foro reencendió la llama de la esperanza y de la utopía.
Chico Whitaker - El Foro de enero de 2010 en el Gran Porto Alegre es el primero de una serie de 27 Foros Sociales que se realizarán por todo el mundo durante este año, rumbo al próximo Foro Social Mundial que tendrá lugar en enero de 2011 en África, en Dakar, Senegal. Éste fue el formato (Foros Sociales en todo el mundo) adoptado en el proceso de los FSM para 2010. El FSM no "vuelve" por lo tanto a Porto Alegre. Allá se realizará un Forum Social especial porque en el gran Porto Alegre se realizará un gran seminario de evaluación de los diez años de camino, organizado por el grupo de entidades y personas que promovieron en 2001 el primer FSM.
Los Foros Mundiales realizados en estos diez años fueron todos diferentes unos de otros, y cada uno aprendió las lecciones del anterior. Al mismo tiempo se multiplicaron los Foros Regionales (como el del Sudeste Asiático en 2003, los Europeos -con su quinta edición en 2010, en Estambul- y el Norteamericano, con su segunda edición también este año, en Detroit), los nacionales y los locales. Se realizaron movilizaciones mundiales significativas a partir de propuestas que fueron discutidas en los Foros, como la gran Manifestación por la Paz y contra la guerra en Irak, en febrero de 2003, en la que quince millones de personas se manifestaron en las calles.
En 2004 un Forum Social Mundial por primera vez se organizó en otro país, con éxito -en la India, donde la participación de movimientos populares fue la característica sobresaliente. Los formatos también se fueron alterando, intercalándose entre los Foros Mundiales otros tipos de manifestaciones, como en 2006, los tres Foros casi simultáneos en tres continentes, un día Mundial de Acción en 2008, y la serie de Foros a realizarse ahora en 2010. Se afirmaron algunas orientaciones básicas -contenidas en una Carta de Principios cada vez más aceptada como referencia general- como el carácter del Forum como un espacio abierto, la horizontalidad en la organización de actividades en ese espacio, la auto-organización de esas actividades, el rechazo a la elaboración de un documento final único, la no designación de dirigentes o portavoces, el respeto por la diversidad.
Las temáticas discutidas se fueron ampliando, como en 2009, cuando la realización del Foro en la Amazonia estimuló el abordaje de la cuestión ambiental y de la problemática de los pueblos originarios de todos los continentes, a partir de las luchas indígenas de Brasil y de América Latina.
Muchas intuiciones de los organizadores fueron igualmente revelándose, como la adopción de la regla del consenso en las decisiones organizativas, y la búsqueda de la unidad dentro de la diversidad como gran objetivo a ser alcanzado en el proceso. Y la participación fue casi siempre creciente, de las 20.000 personas del FSM de 2001 a las 150.000 del FSM de Belem, en 2009.
Adital - Desde la primera edición hasta ahora, hubo episodios significativos que marcaron al mundo, como por ejemplo la Crisis Financiera Mundial. ¿Cómo el FSM lidia con esas cuestiones?
Chico Whitaker - El episodio más significativo vivido por el mundo en la década fue sin duda la reciente Crisis Financiera, que desmontó el mito de la capacidad de auto-regulación de los mercados. Muchos inclusive dijeron que la crisis le da la razón al FSM como espacio de proposición de otro tipo de globalización. Pero estos temas son discutidos por los participantes de los Foros dentro de una visión de conjunto de la serie de crisis que vive el mundo -alimentaria, política, energética, ecológica... lo que llevó en este último Forum de 2009 a que los indígenas andinos propusieran la realización en 2010 de un Forum Temático sobre lo que llamaron "crisis de civilización". El FSM en tanto FSM no puede posicionarse frente a estas crisis, puesto que es solamente un espacio de encuentro y de articulación. Pero sus participantes vienen construyendo, en el proceso, cada vez más redes y alianzas para actuar más eficazmente.
Adital - A pesar de ser un proceso lento, ¿es posible afirmar que las propuestas del Forum ya comienzan a concretizarse como verdadera alternativa para "otro mundo posible"?
Chico Whitaker - Sin duda el proceso del Forum va permitiendo cada vez más visualizar cómo debe ser construido el mundo que queremos, y qué valores deben regir nuestras vidas para escapar de aquéllos impuestos por la lógica capitalista. Al mismo tiempo se va descubriendo que otras formas de hacer política son necesarias, y que cambiar el mundo implica una multiplicidad y una enorme variedad de intervenciones sobre la realidad. Comienza a crecer la conciencia de la importancia de asegurar que los bienes comunes de la humanidad no puedan privatizarse ni ser transformados en mercadería, como lo exige la dinámica esencial del capitalismo.
La economía solidaria, a su vez, conjuntamente con formas de comercio justo, va difundiéndose por todo el mundo. La esperanza en ese "otro mundo posible" ha influido también en la elección de dirigentes políticos, por lo menos en América Latina. Pero actualmente tal vez sea la crisis ecológica la que pueda proporcionar alternativas capaces de "despertar" a las personas sobre la necesidad urgente de cambiar nuestros modos de producción y de vida.
Adital - ¿Cuál es la importancia del Forum para los movimientos sociales? ¿Han participado en forma efectiva del proceso?
Chico Whitaker - El Forum existe para que aquellos que consideran que otro mundo es posible -además de necesario y urgente- puedan reconocerse mutuamente, aprender unos de otros, descubrir convergencias, construir nuevas alianzas. Como un encuentro abierto para toda la sociedad civil, el Forum es un espacio por excelencia para los movimientos sociales que consideran que todo esto es útil para ellos, y que están interesados en ganar fuerza uniéndose con otros movimientos sociales, con ONGs y con las diferentes entidades que congregan a los muchos sectores de la sociedad civil. Cuando los movimientos sociales no utilizan esta oportunidad que les ofrecen los Foros es porque están mal informados sobre los objetivos del proceso del FSM, están bloqueados por preconceptos o aislados por sus modos de operar. Pero estos obstáculos para su participación van siendo superados poco a poco.
Adital - Existe un intento de criminalización de los movimientos sociales en Brasil así como en otros países de América Latina y el mundo. En ese aspecto, el FSM sirve también como espacio de fortalecimiento de las luchas y de la descriminalización de esos movimientos. ¿Puede hablar sobre esto?
Chico Whitaker - Esos intentos de criminalización de los movimientos sociales son parte de la estrategia de los que no quieren cambiar el mundo -porque en él, tal como ahora es, son privilegiados- para amedrentar y paralizar a los que cuestionan su poder y luchan por justicia. El tema es evidentemente discutido en los Foros y en ellos nacen estrategias y alianzas para hacer frente a esos intentos, formándose redes de resistencia y lanzándose campañas de denuncia. La eficacia de esas alianzas depende naturalmente de la convicción de los que participan en ellas, de la importancia de esa resistencia.
Adital - La edición anterior contó con la participación de gobernantes de Ecuador, Bolivia, Venezuela, Paraguay. ¿Cómo se da ese diálogo con los gobiernos llamados progresistas o de izquierda? ¿Qué importancia tiene eso?
Chico Whitaker - El objetivo del proceso del FSM de reforzar la actuación de la sociedad civil implica asegurar su autonomía en relación con gobiernos y partidos. Por eso mismo ni gobiernos ni partidos pueden, en tanto tales, organizar actividades en los Foros. La presencia de gobernantes (llamados "progresistas" o "de izquierda") depende por lo tanto de invitaciones dirigidas a ellos por participantes de cada Forum. Pero dentro de esta perspectiva la tendencia no es la de ofrecer escenarios ante multitudes sino de organizar diálogos, ya que la sociedad civil actúa tanto presionando como controlando a los gobiernos, más allá de lo que ella misma pueda hacer. Se puede decir que en aquellas actividades de los Foros en los que participan los gobernantes, ellas han sido mucho más importantes para esos gobernantes que para los participantes de los Foros.
Adital - ¿Cuáles son las perspectivas y los desafíos para las ediciones del FSM de los próximos años?
Chico Whitaker - Es necesario, en forma creciente, que haya más conciencia dentro de las organizaciones y los movimientos sociales acerca de que la búsqueda de su articulación mutua y unión es una condición esencial para enfrentar al monstruo de la ideología capitalista, que domina enteramente los corazones y las mentes de los seres humanos en todo el planeta. El proceso de los Foros puede ser un óptimo instrumento para esa toma de conciencia. Pero falta mucho para que sea visto de esa forma por todos los militantes y dirigentes de esos movimientos y organizaciones. Y hay todavía muchas regiones del mundo -apenas si comenzamos a hacerlo conocido en África y menos aún en Asia- en las que el proceso de los Foros todavía no llegó a tener una presencia significativa.
Pero tanto esa expansión como la profundización de la conciencia de la utilidad y de las potencialidades del proceso, pasan por la construcción de consensos entre los que organizan los Foros. El desafío para mí es el de conseguir que prevalezca la visión de conjunto y de largo plazo, a pesar de la extrema urgencia del cambio. Muchas veces la angustia por resultados palpables lleva a tomar caminos que pueden bloquearse más adelante. La experiencia de estos diez años de caminar juntos, me hace creer, sin embargo, en la continuidad y en el enraizamiento del proceso.
Traducción: Daniel Barrantes - barrantes.daniel@gmail.com
Fuente: http://www.adital.com.br/site/noticia.asp?boletim=1&lang=ES&cod=44169
CONTRA LA PERSECUSIÓN A DEFENSORES DE DERECHOS HUMANOS
La Comisión Federal de Electricidad (CFE) primero ha criminalizado la protesta social, con el apoyo de la PGR. Fue así que metió a la cárcel a dirigentes del movimiento de Resistencia Civil contra las Altas Tarifas de Luz en Candelaria, Campeche. Desde julio de este año permanecen en la cárcel de Campeche, Campeche, Sara López, Joaquín Aguilar y Guadalupe Borja acusados, como los presos de Atenco, de privación ilegal de la libertad aunque en realidad por oponerse a las altas tarifas de la luz. Ahora, no solamente criminaliza a los que protestan por esas tarifas, sino que busca criminalizar a los defensores de derechos humanos, especialmente a abogados como Hugo Rosas que es parte del equipo jurídico que defiende a los presos de Campeche. Este lunes 28, elementos de la PGR se han presentado en la casa de familiares de Hugo buscándolo. Hugo Rosas es parte del equipo de abogados de la Senadora Rosario Ibarra que defiende a Sara López, Joaquín Aguilar y Guadalupe Borja y como colaborador de Rosario Ibarra participa también en otros casos de defensa de derechos humanos, como es el caso de Lucía Morett. Aparentemente la CFE ha presentado una denuncia contra Hugo Rosas y otras personas que defienden a los presos de Campeche acusándolo de ¡"daños" contra la propia CFE! Una semana después de que Sara, Joaquín y Guadalupe fueron encarcelados en Campeche, hicimos un acto de protesta ante la CFE en su edificio de Insurgentes y Reforma. Una comisión entró a entregar una carta de protesta. La comisión estuvo integrada por Hugo Rosas, Rodolfo Chávez de CECOP, Carlos Beas de UCYSONI y Martín Velázquez de AMAP. A las cuatro personas que entraron a la CFE, a nombre de los que asistimos al mitin, les han abierto una averiguación previa por ¡daños! Pretenden intimidar con estas medidas a los movimientos de protesta y ahora a los defensores de derechos humanos, pero no lo lograrán. Tampoco permitiremos que más compañeros sean encarcelados por oponerse a los designios privatizadores y antipopulares de la CFE y el gobierno. Por el contrario, insistimos en exigir la libertad de nuestros compañeros presos políticos en Campeche: Sara López, Joaquín y Guadalupe Borja Edgard Sánchez Ramírez |
Cardenales y obispos, protegidos por el Papa y Calderón, buscan recuperar privilegios en México
Carta a Monseñor
“La militarización no es el camino para encarar la crisis política de México.”
29-12-2009 |
Traducido del inglés para Rebelión por Germán Leyens |
¿Puede explicar lo que es el Plan México y cómo se relaciona con el Acuerdo de Libre Comercio de Norteamérica? (NAFTA)
El Plan México, también llamado Iniciativa Mérida, es un plan trienal de cooperación en la seguridad regional elaborado por el gobierno de Bush y presentado en octubre de 2007. El plan surgió de la extensión del NAFTA a áreas de seguridad, conocida como ASPAN: Alianza para la Seguridad y Prosperidad de América del Norte. Originalmente el Plan México debía ser anunciado en el contexto de la cumbre trinacional de ASPAN pero fue retrasado. Se presenta como una petición del presidente mexicano Felipe Calderón de ayuda estadounidense a la guerra contra la droga, pero en realidad fue preparado en Washington como una manera de “extender las fronteras” del perímetro de seguridad de EE.UU., es decir que México se ocupara de prioridades de seguridad de EE.UU., incluyendo el control policial de su frontera sur y que permitiera que compañías y agentes de EE.UU. participaran en operaciones de inteligencia y seguridad de México.
El Plan México propuso 1.400 millones de dólares sobre todo en financiamiento militar extranjero. Se describe como una propuesta de “Contranarcóticos, contraterrorismo y seguridad de la frontera.”
Después de su elección como presidente, Felipe Calderón comenzó a utilizar a los militares en la llamada Guerra contra la Droga. Desde entonces ha habido un aumento permanente de los despliegues de tropas y una escalada de la violencia. ¿Cuál es el papel de Washington en esta continua operación de contrainsurgencia?
El gobierno de Obama ha apoyado el plan e incluso ha solicitado, y recibido del Congreso, fondos adicionales más allá de lo solicitado por el gobierno de Bush. En los tres años desde que Calderón lanzó la guerra contra la droga en México con el apoyo del gobierno de EE.UU. la violencia relacionada con la droga ha aumentado a más de 15.000 ejecuciones y los informes formales sobre violaciones de derechos humanos se han multiplicado por seis. Más de 45.000 soldados han sido desplegados en calles y comunidades por todo México. Washington reconoce serios problemas con el modelo de la guerra a la droga y sin embargo sigue afirmando, de modo absurdo, que el aumento de la violencia en México es una buena señal – significa que los cárteles están sintiendo la presión, dice el argumento. El plan en sí no contiene ningún parámetro real de lo que los ciudadanos deben esperar como señales de progreso para que pueda seguir financiándose a pesar de su fracaso.
Se solicitó al Departamento de Estado que presentara un informe de derechos humanos para adjudicar un 15% de algunas partes de las asignaciones y finalmente lo hizo el verano pasado. Pero el informe señaló que incluso ante una falta de progreso en los derechos humanos (incluyendo informes sobre uso impune de tortura, falta de justicia civil para las fuerzas militares, asesinatos de civiles y corrupción) el simple hecho de presentar el informe constituía un cumplimiento y adjudicó los fondos.
Hasta ahora el esfuerzo no se describe como contrainsurgencia, porque México no tiene un movimiento formal de insurgencia generalizada. Sin embargo, los ataques contra dirigentes opositores de base en los últimos años han generado temores de que los disidentes son y serán un objetivo de la sociedad crecientemente militarizada.
En su artículo usted dice que la Iniciativa Mérida es la consecuencia directa del marco de seguridad nacional impuesto en las relaciones bilaterales. ¿Significa que el gobierno de Bush estaba utilizando la Guerra contra la Droga y la Guerra contra el Terrorismo para ocultar sus verdaderos objetivos políticos? Si es así, ¿cuáles son esos objetivos?
El gobierno de Bush utilizó el paradigma del contraterrorismo para extender la presencia de EE.UU. en áreas estratégicas. En México, la idea era abrir lucrativos contratos de defensa e inteligencia mientras se ayudaba al gobierno derechista, que todavía enfrentaba serios problemas de legitimidad debido a acusaciones no esclarecidas de fraude en las elecciones de 2006.
¿Hay agentes de inteligencia, fuerzas especiales o mercenarios de EE.UU. que realizan operaciones de contrainsurgencia en México? ¿Se pide a México que permita que los militares de EE.UU. operen en México debido a acuerdos de seguridad y/o comercio?
México no permite soldados de EE.UU. en su territorio. Sin embargo, hay una presencia creciente de la Administració
¿Qué efecto ha tenido la militarizació
Laura Carlsen: Ha habido un aumento de las violaciones de derechos humanos por las fuerzas armadas. En algunas regiones, dirigentes disidentes han sido atacados por los militares. Mujeres, gente indígena, migrantes, disidentes y jóvenes son particularmente vulnerables.
Nota: “La militarizació
Más de 50 organizaciones de derechos humanos mexicanas han presentado una petición al Congreso para que retire su apoyo a la Iniciativa Mérida. Su carta dice:
“Respetuosamente solicitamos que el Congreso de EE.UU. y el Departamento de Estado, no asigne fondos o programas directos a las fuerzas armadas tanto en la Iniciativa Mérida como en otros programas para apoyar la seguridad pública en México…
“Instamos a EE.UU. a considerar modos de apoyar una respuesta integral a los problemas de seguridad; basada en el afrontamiento de las causas a la raíz de la violencia y en el pleno respeto de los derechos humanos; no en la lógica del combate.”
¿Ha visto alguna mejora o cambio en la política desde la elección de Barack Obama?
No. El gobierno ha dado su pleno apoyo a la fracasada guerra a la droga. Sin embargo hay signos de reforma de la política hacia la droga en la política interior que podrían llegar a afectar la manera como se ven los esfuerzos extranjeros contra los narcóticos. La retórica de “co-responsabilidad” no es realmente nada nuevo y los esfuerzos por reducir el tráfico y la demanda de armas no han sido seguidos por nuevas políticas. El enfoque sigue siendo primordialmente militar y violento, sin que haya dinero alguno incluido en la iniciativa Mérida para aspectos sanitarios como el tratamiento o la prevención de la adicción.