domingo, 20 de enero de 2013

Seguimos en alerta roja contra el maíz transgénico


Seguimos en alerta roja contra el maíz transgénico



Boletin de Prensa
OSC de DH

En septiembre de 2012, las empresas Monsanto, Pioneer y Dow solicitaron permisos para sembrar maíz transgénico de manera comercial, pero la administración saliente no lo otorgó. Mientras tanto, las acciones contra el maíz transgénico en todo México y en el mundo se multiplicaron.
A pesar de que la moratoria sobre el maíz transgénico quedó nula desde 2009, sigue vigente entre las más de 1200 comunidades que nos reconocemos en la Red en Defensa del Maíz, junto con el Movimiento Urbano Popular, el Movimiento Estudiantil Yo soy 132 Ambiental y Unorca-Vía Campesina América del Norte, entre varias más. Rechazamos tajantemente al  maíz transgénico por representar un crimen contra la humanidad, ya que destruye la integridad genética, la fuerza vital, de uno de los cuatro principales alimentos de todos los habitantes del mundo, en su centro de origen. Destruye las posibilidades de producción independiente, plantea una uniformidad útil únicamente a la industria, y está cuestionado en todo el mundo por sus efectos en la salud humana y el medio ambiente. La contaminación transgénica de las variedades nativas sería inevitable. Además, los transgenes están patentados, y las compañías exigen el pago de regalías por su uso, sea intencional o accidental.
Es una acción criminal autorizar siembras transgénicas de maíz en México, pues hay cada vez más evidencias de que el maíz transgénico es dañino a la salud humana, según implican los recientes estudios independientes del francés Erick Giles Seralini. El maíz transgénico amenaza la posibilidad de lograr la soberanía alimentaria, de tener alimentación digna y poder reconstituir el tejido social en miles de comunidades asoladas por la violencia, la pobreza y la urbanización salvaje que sobreviven y se organizan en torno a la siembra de las miles de variedades de maíz adaptadas por milenios a las condiciones ambientales, a los suelos y a las necesidades y gustos de los pueblos de México.
Nos preocupa la situación en que se encuentran los agricultores de Sinaloa y Tamaulipas, donde se han solicitado cientos de miles de hectáreas para siembra comercial de maíz transgénico, que probablemente sufran muchas presiones por parte de Monsanto y Syngenta para que siembren las variedades transgénicas, y les decimos a todos, sean agricultores privados, ejidatarios u organizaciones de productores, que consideren el enorme daño que estos cultivos van a ocasionar a la biodiversidad del maíz (por contaminación transgénica de  las variedades del maíz), a las estrategias independientes de producción agrícola, al futuro de las familias productoras, a la seguridad alimentaria y la salud de la población mexicana, y a fin de cuentas que consideren la dependencia brutal que generará de unas cuantas voraces corporaciones.
POR TODO EL PAÍS se están organizando denuncias específicas de la violencia contra el maíz, la autonomía y los derechos de los pueblos en el marco del Tribunal Permanente de los Pueblos, capítulo México. Desde muchos países recibimos miles de cartas y firmas, como la petición realizada por la organización internacional AVAAZ, “Detener a Monsanto en México”, para defender nuestro maíz, firmas y reclamos que ya fueron turnados a Presidencia, a SAGARPA, a Semarnat y CIBIOGEM; y sabemos de manifestaciones solidarias de jóvenes en Alemania y otros países.
En diciembre pasado, ante la presión de las organizaciones en defensa del maíz, funcionarios de la SAGARPA ofrecieron hablar en extenso del tema de manera pública. El debate, organizado por el Movimiento Estudiantil 132 Ambiental, abierto a todo el público y medios, ocurrirá el 7 de febrero a las 11:00 AM, en el Auditorio Alberto Barajas Celis de la Facultad de Ciencias de la UNAM, con la presencia del Dr. Antonio Turrent, Presidente de la Unión de Científicos Comprometidos con la Sociedad, entre otros panelistas de las organizaciones y los movimientos sociales.
Red en Defensa del Maíz, Yo Soy 132 Ambiental, Movimiento Urbano Popular, Unorca-
Vía Campesina América del Norte
Para mayor información
Verónica Villa, Grupo ETC-Red en Defensa del Maíz
Silvana Almaraz, Movimiento Estudiantil 132 Ambiental
Iván Hernández, Centro de Estudios para el Cambio en el Campo Mexicano, CECCAM
veronica@etcgroup.orgivanhb30@hotmail.comuelitii@gmail.com
Tel: 04455 5432 4679; 5563 2664
http://redendefensadelmaiz.net/
Organizaciones convocantes:
Red en Defensa del Maíz: conformada por más de 900 organizaciones y comunidades de todo el país, principalmente campesinos indígenas.
Movimiento Estudiantil  Yo Soy 132-Ambiental
Movimiento Urbano Popular, MUP
Unión Popular Revolucionaria Emiliano Zapata, UPREZ
Centro de Estudios para el Cambio en el Campo Mexicano, Ceccam
Jóvenes ante la Emergencia Nacional
Estudiantes de Chapingo contra el Maíz Transgénico
Centro Nacional de Apoyo a Misiones Indígenas, Cenami
Grupo de Acción sobre Erosión, Tecnología y Concentración, Grupo ETC-México
GRAIN-México
UNORCA/Vía Campesina América del Norte
Boletín de prensa

México, 18 de enero de 2013
Información difundida por el Área de Comunicación y Visibilidad de Cencos

En defensa de nuestro Maíz, rechazamos cultivos transgénicosDestacado

por Red en Defensa del Maíz
México: En defensa de nuestro Maíz, rechazamos cultivos transgénicos
Declarar 2013 como año de resistencia contra el maíz transgénico y en defensa del maíz nativo y de la vida y autonomía de los pueblos del maíz.

*Reunidos en nuestra primera asamblea de 2013, nosotras, las comunidades organizaciones y personas que nos reconocemos en la Red en Defensa del Maíz desde hace once años, elevamos nuestra voz para repetir una vez más que rechazamos tajantemente la introducción, el trasiego, la comercialización, intercambio, experimentación, almacenaje y la siembra de cualquier cultivo transgénico.
* En particular rechazamos todo lo relacionado con el maíz transgénico por atentar directamente contra más de diez mil años de cuidado del maíz nativo, por atacar directamente las estrategias agrícolas y de subsistencia de los pueblos y las comunidades; por atentar contra la seguridad y la soberanía alimentarias de México, por atentar contra la producción libre y autónoma de alimentos con semillas nativas nacionales libre de patentes y sin modificación transgénica. Por atentar contra la salud de la población en general.
* Lo hemos dicho antes ya, pero es necesario repetirlo también: México y toda Mesoamérica (y más) es centro de origen y diversificación del maíz. Por tanto rechazamos el empeño del gobierno por imponernos unos supuestos centros de origen que presuponen que hay otros muchos sitios donde se puede plantar cultivos transgénicos. Exigimos la integridad política, biológica y territorial de México como país CENTRO DE ORIGEN y Diversidad Continua, encarnado en la vigencia de los pueblos indígenas.
* Hoy, a nuestros reclamos de once años de resistencia —desde que se descubrió la contaminación a trasmano que intentó el gobierno en Oaxaca, lo que dio pie a la formación de nuestra Red—, tenemos que sumar nuestra palabra a todas aquellas voces que ya sonaron la alarma ante la mera posibilidad de que se aprueben los permisos solicitados para sembrar transgénicos comercialmente en más de 2 millones 400 mil hectáreas, en los estados de Sinaloa y Tamaulipas. Siendo estas entidades sitios que siembran enormes cantidades para consumo humano en las grandes ciudades del país, se las inundaría con un maíz contaminado que en otros países ha sido objeto de estudio y han hallado que es nocivo para la salud. Lo mismo que hemos venido diciendo desde nuestras comunidades y organizaciones durante estos once años.
* Saludamos entonces los trabajos del doctor Seralini que con gran valentía ha estado enfrentando los intereses de las agroindustrias. Seralini y su equipo siguen sin callarse ante lo que consideran un gran daño potencial a la salud humana con posibilidades de ocasionar cáncer en su ingestión repetida, lo que desmiente las afirmaciones de Monsanto de que los transgénicos son inocuos.
* Nos preocupa la situación en que se encuentran los agricultores de Sinaloa y Tamaulipas (y en general del norte del país). Suponemos que probablemente las empresas semilleras los presionan con ofrecerles sólo semillas transgénicas, por parte de Monsanto, Pioneer y Dow para que siembren las variedades transgénicas que les están ofreciendo y casi que forzando a utilizar, y les decimos a todas esas personas, sean agricultores privados, ejidatarios u organizaciones de productores, que consideren el enorme daño que estos cultivos van a ocasionar a la biodiversidad del maíz (por la enorme erosión a las variedades del maíz nativo), a las estrategias independientes de producción agrícola, al futuro de las familias productoras, a la seguridad alimentaria y la salud de la población mexicana. A fin de cuentas promoverá una dependencia brutal hacia unas cuantas voraces corporaciones.
Sabemos que las presiones son muchas, y que en las condiciones de crisis en México y en el mundo es difícil zafarse de ellas, pero desde acá, cariñosamente, les hacemos un llamado a dialogar con la Red en Defensa del Maíz, para que juntos entendamos el momento que vivimos, en algún sitio y tiempo que podamos acordar; para que discutamos los graves riesgos que tenemos por delante y las maneras más dignas que podemos todavía emprender (junto con muchas personas) para salvar al maíz, uno de los cuatro cultivos más importantes en la historia del mundo.
* Saludamos a todas las comunidades y organizaciones que desde el nivel local y regional han logrado establecer acuerdos, estatutos o reglamentos —como un freno real a la entrada de los transgénicos a sus lugares y enclaves mediante una actitud de atención, alerta y cuidado; desechando o frenando todas las semillas extrañas, las semillas híbridas o ajenas que los programas de gobierno o las empresas quieren imponerle a las comunidades a cambio de otros programas o proyectos.
* Esa moratoria real, se ha mantenido estos once años y México sigue siendo un país donde todavía no nos vencen los transgénicos. Por eso es importante ahora, ante una emergencia tan grave como la que vivimos, redoblar esfuerzos, atención, cuidados, para mantener y reforzar las semillas nativas y los canales de confianza que hacen posible su intercambio seguro y la diversidad que es su corazón, al tiempo de desterrar toda semilla ajena, sobre todo si son semillas que nos promueve el gobierno y las empresas.
* Por supuesto, ahora ya no sólo es un problema de siembra atenta, cultivo cuidadoso o intercambio de semillas por los canales de confianza. Ahora también debemos prestar atención a la procedencia de todo el maíz que consumamos, sabedores de que hay ahora infinidad de productos que lo contienen. Entonces debemos redoblar la atención para desechar los productos procesados que contienen algún ingrediente basado en maíz industrial, pues seguramente éste será transgénico.
* Queremos ahora invitar a muchas organizaciones que han dado muestras de estar genuinamente preocupadas por la inminente invasión transgénica a que sumemos esfuerzos para trabajar: a veces juntos, a veces cada quien en sus esfuerzos propios, para erradicar totalmente a los OGM de México y del mundo. No siempre coincidiremos en todas las acciones, pero seguramente nos acompañaremos en algunas de ellas. Saludamos especialmente al Yo soy 132 ambiental, a los Jóvenes ante la Emergencia Nacional, a las organizaciones de Movimiento Urbano Popular (en particular a la Unión Popular Revolucionaria Emiliano Zapata-UPREZ), y a los científicos comprometidos, a los científicos éticos, como la Unión de Científicos Comprometidos con la Sociedad (UCCS), por haber hecho sonar la alarma en esta coyuntura y haber sumado sus fuerzas para exigir que NO se otorguen los permisos de siembra comercial que se pretendían aprobar desde el gobierno de Felipe Calderón.
* Así consideramos un triunfo ser parte del esfuerzo nacional de haber podido esgrimir argumentos, exigir a las autoridades y alzar nuestra voz, para frenar los permisos durante el gobierno anterior, pero no consideramos que el peligro pasó. Sabemos muy bien que en cualquier momento pueden recomenzar los esfuerzos por que se aprueben los permisos. Por ahora, debemos aprovechar el tiempo para convocar más respaldos internacionales y toda la resistencia nacional posible. En ese contexto internacional saludamos las manifestaciones que desde Berlín coincidieron con muchas organizaciones mexicanas para hacer patente nuestro agravio por la posible aprobación de los permisos de siembra comercial de los transgénicos, y a la organización Avaaz, que juntaron más de 40 mil firmas en una campaña de solidaridad con la lucha en México.
*Saludamos también la digna lucha que se libra contra la invasión de transgénicos o contra las privatizadoras leyes de semillas como UPOV o de variedades vegetales en todo el continente: en Paraguay, donde incluso hubo un golpe de Estado para favorecer a la agroindustria; en Honduras, Costa Rica, Colombia, Ecuador, Bolivia, Chile, Argentina y Uruguay. Allá, como en México la gente está en resistencia. Sepan que reconocemos que nuestra lucha por las semillas nativas y una agricultura independiente es la misma.
* Una parte crucial de ese esfuerzo de defensa del maíz es sin duda el Tribunal Permanente de los Pueblos, al que reconocemos su esfuerzo por abrir un espacio para que la sociedad mexicana exprese sus agravios y plantee sus exigencias —ante personas de reconocida autoridad moral, a nivel internacional, que darán fe de que nuestros agravios son reales y de que nuestros señalamientos de responsabilidad y están planteados con objetividad y documentación suficiente para configurar casos jurídicos con pruebas suficientes. Reivindicamos entonces ser parte del Capítulo México del Tribunal Permanente de los Pueblos ante el cual presentamos ya un borrador de demanda que se irá refinando conforme más casos y argumentaciones se presenten en las diversas preaudiencias que vamos planificando a lo largo de este año.
* Por todo lo anterior, y haciendo eco con la resistencia que surge de todo el país, nos sumamos a la propuesta de las comunidades y organizaciones de Oaxaca, de declarar 2013 como año de resistencia contra el maíz transgénico y en defensa del maíz nativo y de la vida y autonomía de los pueblos del maíz.
* Por último, queremos salir al paso de ciertas informaciones que señalan que estamos en contra de los permisos de siembra porque no hay las condiciones de bioseguridad suficientes, según nota de Matilde Pérez, en La Jornada del día 16 de enero. Queremos enfatizar que si bien estamos contra los permisos de siembra comercial como es público y sabido, para nosotros es crucial señalar que NO HAY BIOSEGURIDAD ALGUNA QUE PUEDA SERVIR CONTRA LOS TRANSGÉNICOS.
Nosotros no planteamos mejores medidas de bioseguridad u otras medidas de bioseguridad.
En cambio...
Rechazamos cualquier siembra o comercialización, almacenamiento, trasiego, experimentación, siembra comercial de maíz transgénico en cualquier parte del territorio nacional.
No a los organismos genéticamente modificados,
No al maíz transgénico.
Moratoria y prohibición definitiva a los transgénicos.
Queremos un mundo libre de transgénicos.

Red en Defensa del Maíz:
Comunidades Indígenas campesinas: Hopelchén, Suctuc, Xcalot Akal, X kix, Bolonchen, Xbilinkok, Ebula, Crucero San Luis de la región de Los Chenes del estado de Campeche; Maní, Vicente Guerrero del Sur del Estado de  Yucatán; Comunidades del Municipio de Las Margaritas de a zona de la Frailesca del Estado de  Chiapas; Salto de Agua, Arroyo Largo, El Coyol, Ángel R. Cabada de Los Tuxtla, Huayacocotla del Estado de Veracruz; Santa Cruz de la Montaña Centro del Estado de Guerrero; Yayalag; Lachixila, La Selva, de Camotlan; Guelatao; Analco Ixtlán de Juárez Sierra Norte, Alotepec Mixe, El Porvenir, Maguey Largo Valles Centrales,  Comunidades de la Sierra Sur, San Miguel Chongos de la Chontal, San Miguel Tenango, Comunidades del Istmo de Tehuantepec, del Estado de Oaxaca; Bienvenido Hermenegildo Galeana Sierra Norte del Estado de Puebla; Huejutla, Oxeloco, Atlaco, Atlajco de la Huasteca Hidalguense; Zacatepec del Estado de Tlaxcala, Comunidades Rarámuris de la Sierra Tarahumara del Estado de Chihuahua; Palos Altos, El Grullo, Ixtlahuacan, San Sebastián Teponahuaxtlán,  del Estado de Jalisco; Comunidades de los Municipios de Dolores Hidalgo, San Miguel del norte del Estado de Guanajuato; La Magdalena Contreras de Distrito Federal; Lerma Estado de México.
Organizaciones Indígenas y civiles de las regiones: Ka Kuxtal Much Meyaj A.C.; T’oojil Xíimbal SC, Misioneros, Escuela de Agroecología, Misión de Guadalupe, Tequio Jurídico AC, UNOSJO, Ser Mije, Uken Ke Uken, Colectivo Oaxaqueño por la Defensa del Territorio,  ORAB AC, UNISUR, GEA AC, CONTEC AC, SINE AC, CREO AC, OMSA, CEDESA AC, CODECIN, UCANG, comunidades Campesinas en Camino, CACID AC.
Organizaciones Civiles: Ceccam AC, Ccasifop AC, Colectivo por la Autonomia, Grupo ETC, Cenami AC, GRAIN, Jóvenes ante la Emergencia Nacional, 132 Ambiental, Unión Popular Revolucionaria Emiliano Zapata UPREZ, Movimiento Urbano Popular, Via CAMPESINA, Asamblea Nacional de Afectados Ambientales.

No hay comentarios:

Publicar un comentario