Incumplen militares con presentar a los soldados que mataron a golpes al joven
Zacarías Cervantes
Tlacotepec
Autoridades de la 35 Zona Militar con sede en Chilpancingo incumplieron con las autoridades municipales y pobladores de esta cabecera municipal de presentar en público a los militares que mataron a golpes del joven Juan Alberto Rodríguez Villa, de 19 años, y de las lesiones a Francisco Javier Martínez, la noche del viernes.
Vecinos y autoridades municipales convirtieron una concentración en mitin y acordaron trasladarse este lunes a la capital del estado, para entrevistarse con autoridades del gobierno estatal y diputados del Congreso local y demandar su intervención a fin de que los jefes militares acudan a ese pueblo a dar la cara “por lo que hicieron” sus subalternos.
Los jefes militares no acudieron a la reunión con las autoridades municipales y pobladores, pero soldados con metralletas montadas en camionetas Pick Up pasaron por la calle aledaña al Palacio Municipal, cuando cientos de ciudadanos todavía estaban reunidos, lo que fue considerado como un acto de provocación. El paso de los militares provocó tensión, sobre todo cuando uno de los reunidos gritó “miedosos”, y otro más espetó: “¡ora putos!”.
Los vecinos se concentraron el medio día de ayer en la explanada del Palacio Municipal encabezados por el presidente municipal Olaguer Hernández Flores y el diputado federal por el primer distrito al que corresponde este municipio, Cuauhtémoc Salgado Romero, quienes se sumaron a la indignación de los familiares por la agresión a los jóvenes porque: “más que un maltrato a los muchachos es una burla a nuestro pueblo”, dijo un indignado alcalde.
Luego de que un grupo de aproximadamente 10 militares de la 35 Zona Militar agredieron a golpes a Juan Alberto Rodríguez Villa y a su amigo Francisco Javier Martínez la noche del viernes, y que como consecuencia de la golpiza, el primero falleció, el sábado acudió a esta cabecera municipal el coronel de infantería de la 35 Zona Militar, José Pedro Arciniega Gómez, quien se comprometió que a las 12 del día de ayer domingo regresaría y presentaría a los responsables.
Después del sepelio de Juan Alberto, cientos de ciudadanos se concentraron en la explanada del Palacio Municipal, en espera del jefe militar con los responsables de la golpiza, para exigir justicia y castigo a los soldados golpeadores.
En la explanada e inmediaciones del Palacio Municipal, se concentraron unos 500 pobladores tanto de la cabecera municipal, como de algunas comunidades cercanas, entre ellos se encontraban los familiares de los jóvenes golpeados, amigos, vecinos y habitantes solidarios. Asimismo se encontraba el presidente municipal Hernández Flores y el diputado federal priísta Salgado Romero.
Algunos de los asistentes levantaban pancartas con leyendas, algunas de ellas decían: “Queremos seguridad, no golpes, no muertos, no abusos”; ¿Dónde están las garantías individuales?”; “No uno más, ni uno menos, queremos justicia”, y “Creemos en las leyes, queremos un gobierno honesto”.
La espera por los jefes militares se mantuvo hasta a la una de la tarde, cuando la concentración se convirtió en un mitin.
El alcalde en su primera intervención informó a los asistentes que el sábado el coronel de infantería José Pedro Arciniega Gómez, se comprometió que a las 12 del día de este domingo acudiría para presentar a los soldados responsables.
Informó que después de la agresión de los militares a Juan Alberto Rodríguez Villa y a Francisco Javier Martínez, se comunicó con representantes de la Comisión de Defensa de los Derechos Humanos, Juan Alarcón, con el presidente de la Comisión de Gobierno del Congreso local, Héctor Vicario Castrejón, y con el diputado federal Cuauhtémoc Salgado Romero para pedir su intervención en la denuncia ante las autoridades competentes de los hechos.
Y luego demandó que ante estos casos el pueblo se debe mantener unido y que esto no sea motivo de división, a fin de que puedan enfrentar juntos, autoridades y pueblo, el problema.
En tanto el diputado federal Cuauhtémoc Salgado Romero lamentó los hechos y dijo que acudirá a las autoridades competentes para denunciar estos abusos que cometieron los militares y otros más que han sido denunciados en la región, “lamento mucho que esto esté pasando en Guerrero”, dijo.
En el mitin estuvo también el, el agente del Ministerio Público que abrió la averiguación previa con motivo de estos hechos. El funcionario señaló que sólo está en espera de la declaración de algunos testigos para darle curso a la indagatoria, “el presidente municipal es testigo que se están llevando las cosas conforme a la ley”, aseguró.
El mitin se desarrolló entre algunos gritos e intervenciones formales de ciudadanos que exigieron justicia, y detener los abusos que han venido cometiendo los militares en ese municipio, “tenemos que unirnos para hacer algo, no podemos seguir así”, dijo un campesino, que pidió no revelar su identidad.
Ante la inasistencia de los jefes militares a la reunión, el alcalde propuso trasladarse este lunes a Chilpancingo para denunciar los hechos ante las autoridades competentes y fue reprendido por algunos de los asistentes, quienes le dijeron que son los militares quienes deben acudir a la cabecera municipal “a dar la cara”.
Después el alcalde reviró y dijo que, en su calidad de autoridad municipal exigiría “que vengan (los militares) aquí”, también indicó que pediría la presencia del secretario de Gobierno del estado, Guillermo Ramírez Ramos, para que escuchara la inconformidad de la gente con respecto a los atropellos y abusos que cometen los militares.
Pero insistió que para ello este lunes se trasladaría a Chilpancingo para entrevistarse con las autoridades e insistió que quien quisiera acompañarlo la salida sería a las cinco de la mañana, e insistió que “yo me veo obligado a acudir ante otras instancias para exigir que los jefes militares vengan aquí”.
Finalmente los asistentes estamparon su firma en hojas que acompañarán a un escrito que entregarán este lunes a las autoridades estatales y federales, donde darán a conocer los hechos y la exigencia de justicia.
Cuando todavía no se disolvía la concentración en la calle junto al Palacio Municipal, pasaron dos camionetas Pickup con militares que sujetaban ametralladoras, en las dos camionetas se transportaban de entre 12 a 15 militares.
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