sábado, 13 de septiembre de 2014

Detención de Mario Luna, vocero de la Tribu Yaqui

Detención de Mario Luna, vocero de la Tribu Yaqui

 
 
México: Detención de Mario Luna, vocero de la Tribu Yaqui
Acción solidaria, viernes 12 de septiembre de 2014. 3 pm en la Representación de Sonora, Paseo de las Palmas 1005, Colonia Lomas de Chapultepec. 
Familiares y amistades de Mario Luna llegaron al CERESO de Hermosillo, Sonora para confirmar su dentención en dicho lugar. Personal de la Subsecretaría de Derechos Humano de la Secretaría de Gobernación y Carlos Alberto Navarro Sugich, Procurador del Estado de Sonora en conferencia de prensa confirmó la detención. 
El viernes 12 de septiembre se llevará a cabo una acción solidaria en la representación de Sonora en la Ciudad de México a las 3 pm.
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En la cuenta de facebook de Serapaz México se denunció que:
"El día de hoy, jueves 11 de septiembre, a las 11:40 de la mañana de la Ciudad de México y las 9:49 de Sonora, fue detenido el vocero de la Tribu Yaqui Mario Luna por personas vestidas de civil en 4 vehículos no oficiales y en estos momentos ignoramos su paradero. Esto ocurre en el marco de la lucha de la Tribu Yaqui en defensa de su agua, ante la construcción y operación de el Acueducto Independencia. Ignoramos hasta el momento los cargos que se le imputan, sin embargo tenemos conocimiento de un proceso penal que se sigue en su contra sin que existan evidencias de su participación en dichos eventos, y desde hace meses diversas organizaciones de la sociedad civil hemos denunciado que dichas acusaciones son parte de una estrategia de criminalización contra la lucha de la Tribu Yaqui.
Hacemos un llamado al gobernador del Estado de Sonora Guillermo Padrés Elías, para detener esta escalda represiva en contra de los representantes de la Tribu y para que se abran caminos de diálogo que encuentren salidas a este conflicto."
Serapaz México hizo un llamado al gobernador de Sonora, Guillermo Padrés Elías, para que detenga la represión en contra de la Tribu y se abra al diálogo. También pidieron a las autoridades competentes que informen sobre el paradero de Mario Luna y se garantice su integridad física y sicológica.


COMUNICADO DE PRENSA

12 de septiembre de 2014

Ciudad de México, a 12 de septiembre de 2014
A los medios de comunicación,
A la opinión pública nacional e internacional,
El jueves 11 de septiembre de 2014 a las 9:20 de la mañana, fue detenido por cuatro hombres vestidos de civil, Mario Luna, secretario y vocero de la Tribu Yaqui. Mario, por su cargo en la tribu es uno de los compañeros más visibles en la lucha de resistencia que los yaquis llevan a cabo desde hace más de 4 años en contra del Acueducto Independencia, obra hídrica que intenta despojar del agua a toda la región yaqui.
Esta detención se da en un momento particularmente difícil, pues en las últimas semanas el Gobernador del Estado, Guillermo Padrés Elías se ha visto evidenciado por la negligencia y corrupción de su gobierno, en particular, ha causado indignación entre la opinión pública el cinismo con el que ha respondido a las críticas al descubrirse la existencia de su presa particular, con la que se podría abastecer por más de un mes a toda la Ciudad de Hermosillo.
Desde que inició la lucha contra el Acueducto Independencia, la Tribu ha sido señalada reiteradamente por el gobierno estatal en una campaña racista de odio, pues se han referido a ellos como criminales por defender su derecho al agua y ahora vemos el momento cúspide de dicha campaña. La detención del Secretario y Vocero de la Tribu, Mario Luna, bajo cargos  relacionados  al ejercicio de sus usos y costumbres es una muestra del desdén con el que el Gobierno mira su proceso de justicia. Cabe agregar que Mario Luna no se encontraba en el lugar de los hechos, lo cual deja claro el sentido político de su detención.
Las organizaciones que integramos la misión civil de observación, hemos sido testigos respetuosos del proceso, esperando que las instituciones del Estado Mexicano se comportaran a la altura del mismo, sin embargo presenciamos como estas instituciones hasta hoy le han dado la espalda a los Yaquis y han logrado que el estado de derecho sea cancelado para la tribu, sin embargo creemos que están a tiempo de reparar el daño y recuperar la dignidad que sistemáticamente han ido perdiendo.
En el Informe preliminar que hicimos público como Misión Civil de Observación a la Consulta a la Tribu Yaqui, advertimos de las diferentes violaciones a los estándares internacionales y a los derechos de la Tribu que han ocurrido durante el proceso de consulta, al tiempo que realizamos recomendaciones al Estado Mexicano, quien tiene la obligación de generar condiciones de credibilidad para el proceso de consulta y de respeto pleno a los derechos de las y los Yaquis.
Es importante para nosotros señalar que los yaquis no son botín político, que la lucha por el agua significa luchar por la supervivencia de su cultura, no por favorecer a un grupo político o a otro. Esta forma que tiene la clase política de ver todo en votos y elecciones, nada tiene que ver con los pueblos que viven intensamente procesos de lucha por su derecho a seguir existiendo, por lo que la exigencia es para evitar este exterminio en contra de la Tribu, que depende del agua del Río Yaqui en todos los sentidos para su subsistencia.
En este contexto, las más de 100 organizaciones e instituciones académicas que integramos la Misión Civil de Observación levantamos la voz y exigimos la libertad inmediata de Mario Luna y la cancelación de las órdenes de aprehensión que sabemos pesan sobre otros yaquis. De igual manera exigimos el cese a la campaña de hostigamiento y represión en contra de la Tribu y les recordamos que estaremos atentos a las siguientes acciones que los yaquis lleven a cabo en esta fase de lucha.
Por último, convocamos a la sociedad civil a juntos repudiar este hecho y a permanecer alertas ante cualquier nuevo intento por desarticular la digna lucha de la Tribu yaqui.

Atentamente,
Misión Civil de Observación de la Consulta a la Tribu Yaqui
Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez-Centro Prodh, Centro de Estudios Sociales y Culturales Antonio de Montesinos – CAM, Centro de Investigación y Promoción Social – CIPROSOC, Centro de Reflexión y Acción Laboral de Fomento Cultural y Educativo – CEREAL, Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos – CMDPDH, Consultoría Especializada en Justiciabilidad de los DESC – CEJUDESC, DECA Equipo Pueblo, Defensoras voluntarias de Espacio DESC, Espacio de Coordinación de Organizaciones Civiles sobre Derechos Económicos, Sociales y Culturales, Food First Information and Action Network México – FIAN Sección México, FUNDAR Centro de análisis e investigación, A.C., Instituto de Derechos Humanos Ignacio Ellacuría, SJ – IDHIE, Instituto Mexicano para el Desarrollo Comunitario – IMDEC, Liga Mexicana por la Defensa de los Derechos Humanos – LIMEDDH, Movimiento de Pueblos, Comunidades y Organizaciones Indígenas del DF, Programa de interculturalidad y asuntos indígenas de la Universidad Iberoamericana, Oficina Regional para América Latina y el Caribe de la Coalición Internacional para el Hábitat – HIC AL, Proyecto de derecho a la consulta del Instituto de Investigaciones jurídicas  PAPIIT, IN302311 de la Universidad Nacional Autónoma de México, Radar-Colectivo de Estudios Críticos en Derecho (Distrito Federal), SERAPAZ Servicios y Asesoría para la Paz, A.C., Red Nacional de Organismos Civiles de Derechos Humanos “Todos los Derechos para Todos y Todas” (Conformada por 74 organizaciones de derechos humanos de 20 estados del país). 
Para más información:

LA DETENCIÓN DE MARIO LUNA Y LA DEFENSA DEL TERRITORIO YAQUI (SubVersiones)

Agencia Autónoma de Comunicación SubVersiones
En México los derechos fundamentales individuales y colectivos se violentan de manera cotidiana e institucional. No es una afirmación panfletaria ni mucho menos una difamación. Las y los opositores a los planes gubernamentales son«castigados» con amenazas y criminalización.
Para muestra, la lucha de la Tribu Yaqui, quienes se han opuesto –con argumentos y a través de un camino que legalmente les ha otorgado la razón– a la construcción del acueducto Independencia, el cual desviaría el agua del río Yaqui para abastecer, presuntamente, a la población de Hermosillo, capital del estado de Sonora.
Para esta población indígena, la lucha no intercambia por puestos políticos o beneficios individuales. Para los yaquis la lucha contra el acueducto es la lucha por la defensa del agua y del medio ambiente que asegurará la permanencia de su pueblo y del resto de habitantes en toda esta región del norte de México.
Mario Luna, uno de los dos voceros de la tribu –elegido por usos y costumbres, junto con Tomás Rojo– ha explicado muchas veces y en distintos foros el sentido de la lucha yaqui y el porqué de su resistencia contra el acueducto, ha denunciado a las empresas que están sosteniendo lo insostenible: la cervecera Heineken, Ford, Coca-Cola, CEMEX, y algunas más; ha denunciado a la familia Coppel y a los Beltrones como grupos de poder locales que se beneficiarán con este proyecto mal hecho. En este video Mario Luna explica, en breves 10 minutos, lo absurdo que sería desviar el cauce de un río para abastecer a un sector muy reducido de la población de Hermosillo y dejar a la gran mayoría sin agua. Y todo a un alto costo:
Detenido un vocero de la Tribu Yaqui
 
Agencia Autónoma de Comunicación SubVersiones
Publicado el 11/09/2014
En México es casi una institución el que se violenten los derechos fundamentales de los ciudadanos, de manera individual y de manera colectiva. No se trata de un panfleto o una difamación en contra de funcionarios, para muestra, la lucha de la Tribu Yaqui, quienes se han opuesto –con argumentos y a través de un camino legal– a la construcción del acueducto Independencia, el cual desviaría el agua del río Yaqui para abastecer –presuntamente– a la población de Hermosillo, capital del estado de Sonora. Para esta población indígena, la lucha no se traduce en puestos políticos, en beneficios exclusivos o en daños a la naturaleza y el territorio, para los yanquis la lucha contra el Acueducto es la lucha por la defensa del agua y del medio ambiente que asegurará la permanencia de su pueblo y del resto de habitantes en toda esta región del norte de México.
Desde 1940, a través de un decreto presidencial emitido antes de terminar su periodo Lázaro Cárdenas, los yaquis fueron designados como protectores del 50% del río. Con la construcción del acueducto Independencia, no sólo no se les preguntó sino que tampoco se les permitió expresar su opinión al respecto y mucho menos han sido escuchados por las instituciones estatales o federales. El gobierno de Guillermo Padrés decidió ignorar este decreto y además violar el derecho a la libre expresión que en este caso, relacionado a los derechos de agua y saneamiento, tienen los yaquis.
Además, Mario Luna fue detenido el día de hoy a partir de que se activó una orden de aprehensión en su contra y poco después de que se le negara un amparo que mantendría desactivada esta orden. La Procuraduría General de Justicia del Estado de Sonora, a través de su titular, Carlos Navarro Sugich, anunció en conferencia de prensa que el vocero yaqui está ya al interior del CERESO de Hermosillo y que enfrentará el cargo de privación de la libertad (con una pena de 4 a 10 años) y el cargo de robo de vehículo (con una pena de 2 a 10 años). Estos delitos imputados no se han comprobado y su detención tiene ya, tintes políticos, tal y como acontece en el resto del país en donde son los luchadores sociales, los defensores de derechos humanos y los periodistas, mujeres y hombres, quienes están siendo criminalizados parte de las instituciones.
En entrevista para SubVersiones, Ana Cristina Ruelas, del programa de derecho a la información de Artículo 19, afirmó que en el caso de la Tribu Yaqui, el derecho a la libertad de expresión fue violentado:
No hubo un proceso de consulta en la que se le garantizara al pueblo yaqui información suficiente para tomar decisiones sobre el río Yaqui y sobre el uso del agua en ese río. En este caso, los principios relativos a la libertad de expresión y a los derechos al agua y al saneamiento se violaron uno a uno, a partir de tres áreas generales; primero, la propia libertad de expresión en todo lo relativo al agua, lo que uno necesita saber sobre el uso de los recursos naturales, en segundo lugar la posibilidad de emitir las opiniones al respecto y buscar toda la información necesaria; en tercer lugar, la toma de decisiones sobre los proyectos propuestos. La Tribu Yaqui no fue consultada pese al decreto de 1940 en que se les otorgaba el uso del 50% de las aguas del río. El propio Mario Luna nos comentó que no fueron consultados, que no tenían conocimiento de la construcción del acueducto y por tanto se viola la parte de la participación en los procesos de la toma de decisiones sobre los recursos naturales.
En este sentido, la Tribu Yaqui inicia un proceso judicial para garantizar el derecho a la consulta, se les concede el amparo y se detiene la extracción de agua a través del acueducto Independencia así como la construcción del mismo acueducto, sin embargo empieza una campaña de desprestigio en contra de los yanquis dentro del estado de Sonora. Y esta campaña de desprestigio va acompañada de amenazas en contra de los voceros de la Tribu Yaqui. Hay que recordar que la Tribu Yaqui tiene un sistema de usos y costumbres, entonces para efectos del problema del agua del río Yaqui, las únicas dos personas que están autorizadas para hablar en nombre de la tribu son Mario Luna y Tomás Rojo y estás dos personas son exactamente las dos personas que el gobierno de Sonora está acusando de privación ilegal de la libertad y robo.

Desde 1940, a través de un decreto presidencial emitido antes de terminar su periodo Lázaro Cárdenas, los yaquis fueron designados como protectores del 50% del río. Con la construcción del acueducto Independencia, no sólo no se les preguntó sino que tampoco se les permitió expresar su opinión al respecto y mucho menos han sido escuchados por las instituciones estatales o federales. El gobierno de Guillermo Padrés decidió ignorar este decreto y además violar el derecho a la libre expresión que en este caso, relacionado a los derechos de agua y saneamiento, tienen los yaquis.
Además, Mario Luna fue detenido el día de hoy a partir de que se activó una orden de aprehensión en su contra y poco después de que se le negara un amparo que mantendría desactivada esta orden. La Procuraduría General de Justicia del Estado de Sonora, a través de su titular, Carlos Navarro Sugich, anunció en conferencia de prensa que el vocero yaqui está ya al interior del CERESO de Hermosillo y que enfrentará el cargo de privación de la libertad (con una pena de 4 a 10 años) y el cargo de robo de vehículo (con una pena de 2 a 10 años). Estos delitos imputados no se han comprobado y su detención tiene ya, tintes políticos, tal y como acontece en el resto del país en donde son los luchadores sociales, los defensores de derechos humanos y los periodistas, mujeres y hombres, quienes están siendo criminalizados parte de las instituciones.
En entrevista para SubVersiones, Ana Cristina Ruelas, del programa de derecho a la información de Artículo 19, afirmó que en el caso de la Tribu Yaqui, el derecho a la libertad de expresión fue violentado:
No hubo un proceso de consulta en la que se le garantizara al pueblo yaqui información suficiente para tomar decisiones sobre el río Yaqui y sobre el uso del agua en ese río. En este caso, los principios relativos a la libertad de expresión y a los derechos al agua y al saneamiento se violaron uno a uno, a partir de tres áreas generales; primero, la propia libertad de expresión en todo lo relativo al agua, lo que uno necesita saber sobre el uso de los recursos naturales, en segundo lugar la posibilidad de emitir las opiniones al respecto y buscar toda la información necesaria; en tercer lugar, la toma de decisiones sobre los proyectos propuestos. La Tribu Yaqui no fue consultada pese al decreto de 1940 en que se les otorgaba el uso del 50% de las aguas del río. El propio Mario Luna nos comentó que no fueron consultados, que no tenían conocimiento de la construcción del acueducto y por tanto se viola la parte de la participación en los procesos de la toma de decisiones sobre los recursos naturales.
En este sentido, la Tribu Yaqui inicia un proceso judicial para garantizar el derecho a la consulta, se les concede el amparo y se detiene la extracción de agua a través del acueducto Independencia así como la construcción del mismo acueducto, sin embargo empieza una campaña de desprestigio en contra de los yanquis dentro del estado de Sonora. Y esta campaña de desprestigio va acompañada de amenazas en contra de los voceros de la Tribu Yaqui. Hay que recordar que la Tribu Yaqui tiene un sistema de usos y costumbres, entonces para efectos del problema del agua del río Yaqui, las únicas dos personas que están autorizadas para hablar en nombre de la tribu son Mario Luna y Tomás Rojo y estás dos personas son exactamente las dos personas que el gobierno de Sonora está acusando de privación ilegal de la libertad y robo.

Aspecto del río Yaqui, luego iniciados los trabajos de desviación de su afluente. Fotografía: Aldo Santiago

Mario Luna fue detenido por cuatro sujetos que no se identificaron y fue hasta la conferencia de prensa que dio el procurador que se pudo corroborar su paradero. Para la Oficial de Artículo 19, el problema del agua en Sonora, además de estar acompañado de la campaña de desprestigio en contra de los yanquis, tiene una característica particular, «ha sido un motivo para la restricción de espacios cívicos, que es también uno de los principios dentro del derecho a la expresión referidos a estos temas. La restricción de espacios cívicos es usada por gobiernos autoritarios para acallar voces disidentes. En este caso es una grave falta el hecho de que uno de los voceros ya no vaya a poder estar trabajando en pro de esta causa del agua y ahora está sujeto a esperar las acciones que tomen sus abogados y la Tribu Yaqui».
México atraviesa un momento en que la criminalización de la protesta social es pan de todos los días. Para los yaquis, la protesta se origina luego de que no se cumplieron los derechos fundamentales de consulta a los que tienen derecho y se les excluyó de la toma de decisiones; el colmo fue que su lucha jurídica que aparentemente había logrado obtener un amparo y detener las obras del acueducto, fuera desestimada por la intervención de funcionarios del gobierno estatal. ¿Legalidad? ¿Separación de poderes?
Leopoldo Maldonado, abogado de Artículo 19, considera que el caso de la detención de Mario Luna es un ejemplo más de cómo se manipulan las leyes para favorecer los planes del Estado en contra de los pueblos:
Se utiliza las leyes penales, el derecho penal, pues para castigar aquellas voces críticas, aquellas voces que se oponen a las políticas gubernamentales, en el caso de la Tribu Yaqui, al acueducto Independencia, que han querido imponer pese a que se han evidenciado violaciones a sus derechos como pueblos indígenas, empezando por el derecho al agua, continuando por el derecho a la tierra y el territorio. En este sentido cuando estos pueblos y comunidades no se someten a los dictados del gobierno, se utiliza todo el aparato del Estado para reprimirlos y castigarlos, para mantenerlos en una persecución constante que inhibe la movilización social.
Es muy claro, el contexto de Sonora, a la luz de los acontecimientos en donde hubo la contaminación de las aguas en el estado, donde ha habido diversos incidentes donde están implicados grandes grupos empresariales, el gobierno federal y el gobierno local, buscan chivos expiatorios para desviar la atención de todas las corruptelas, específicamente en materia de agua, que es el espacio de disputa de la Tribu Yaqui. Por un lado señalan que la Tribu Yaqui quiere quedarse el agua para perjudicar a millones de personas en la capital del estado, en Hermosillo y por otro lado permiten que las empresas, la minera México, operen sin los mínimos estándares de control ambiental y se generan tragedias como la que ya se ha documentado en las semanas recientes.
Hay un uso diferenciado del derecho, para los empresarios y los grandes corporativos, hay una especie de salvaguardas y protecciones y para los pueblos que están en resistencia, es evidente que todo el peso de la ley y la manipulación del aparato de justicia.
Perspectiva del río Yaqui en su parte no afectada. Fotografía: Regina López
          Finalmente, además de señalar las irregularidades existentes en el proyecto del acueducto es preciso apuntar que la lucha yaqui ha permitido el encuentro de muchas organizaciones sociales, académicas, jurídicas y muchos tipos mismas que han conformado la Misión Civil de Observación de la Consulta de la Tribu Yaqui, espacio diverso que dedica sus esfuerzos a la investigación y argumentación de las razones que presentan los propios yaquis para oponerse al acueducto.
          La detención de Mario Luna, entendida como estrategia represiva, a decir del abogado de Artículo 19, «busca poner a toda la fuerza social que está apoyando a la Tribu Yaqui se enfoque en la defensa de Mario Luna, quien enfrentará un proceso penal en prisión y desviar la atención de la lucha por la defensa del agua, la tierra y el territorio. Es una estrategia añeja, es una estrategia muy probada por los gobiernos de los estados y  por el federal y que ahora la vuelven a aplicar como si tuvieran un manual de operaciones».
Es este el panorama al que se enfrenta la Tribu Yaqui, una nueva etapa de lucha en la que será necesario sumar esfuerzos para conseguir la libertad de Mario Luna y el cese a la imposición del acueducto Independencia

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